Un estudio elaborado por investigadores de la Universidad College London (UCL) del Reino Unido acaba de documentar el primer caso conocido con una incapacidad congénita para reconocer voces, un trastorno poco común denominado fonoagnosia. El grupo de investigación hace un llamamiento público para ponerse en contacto con otras personas que puedan presentar esta deficiencia de forma congénita.
Una reciente investigación ha analizado el caso de una mujer que es incapaz de identificar a las personas por su voz, incluida su propia hija, a la que le cuesta reconocer por teléfono. Esta mujer, conocida como K.H., evita descolgar el teléfono y durante muchos años tan sólo respondía cuando se trataba de llamadas previamente convenidas. En la década de 1980 tuvo un trabajo en el que se dio a conocer con una variante de su nombre, lo que le permitía saber si quien llamaba, al preguntar por ella con ese apelativo, era alguien relacionado con ese empleo.
La mujer, que ahora cuenta con 60 años, fue consciente desde joven de su limitación, a la que no concedió demasiada importancia hasta que leyó un artículo en una revista de divulgación científica que trataba sobre la prosopagnosia, una deficiencia que consiste en la dificultad para reconocer rostros. K.H. se dio cuenta de que ella podría sufrir el equivalente auditivo de esa deficiencia y se puso en contacto con la revista, que la remitió al investigador del Instituto de Neurociencia Cognitiva de la UCL y coautor del estudio Brad Duchaine.
Duchaine manifiesta que “se sufren problemas de reconocimiento de voz como consecuencia de un derrame cerebral o de haber sufrido daños en el cerebro". A la paciente KH se le realizó una exploración del cerebro con técnicas de resonancia magnética, pero no mostró señales de daño en regiones asociadas con la voz o la percepción auditiva, y su capacidad auditiva se reveló normal. “Este es el primer caso documentado de alguien que ha crecido con ese trastorno y sospechamos que hay más personas con problemas”, añade Duchaine, quien además puntualiza que “aunque no reconocer rostros puede provocar mucha más ansiedad social que no reconocer a quien esté al teléfono, identificar la voz de las personas es también una actividad diaria”.
Durante el análisis, los investigadores plantearon a KH diversas tareas que implicaban el reconocimiento de rostros, voces, emociones verbales, la percepción del habla y música. La mujer tuvo dificultades para reconocer las voces de actores famosos y políticos, y también para aprender y reconocer voces nuevas. Mientras que un grupo de control, formado por individuos voluntarios, identificaron las voces de Margaret Thatcher, David Beckham, Dawn French, Chris Tarrant, Joanna Lumley, Sean Connery y Ann Widdecombe, KH sólo logró identificar la voz de Sean Connery.
Sin embargo, realizó con éxito una prueba de reconocer sonidos de emociones humanas, como el triunfo, diversión, enojo, disgusto, miedo, placer, alivio, tristeza y sorpresa, donde acertó el 80% de los casos, un porcentaje similar al del grupo de control. Los resultados también fueron buenos en las tareas de música, identificando canciones populares y discriminando instrumentos. Aunque la paciente manifiesta que es capaz de disfrutar y apreciar la música, no suele reconocer a los cantantes por su voz.
--------------------------
Referencia bibiográfica:
Lucía Garrido, Frank Eisner, Carolyn McGettigan, Lauren Stewart, Disa Sauter, Richard Hanley, Stefan Schweinberger, Jason Warren y Brad Duchaine, “Developmental phonagnosia: A selective deficit of vocal identity recognition”. Neuropsychologia.
--------------------------
Más información en:
Solo para medios:
Si eres periodista y quieres el contacto con los investigadores, regístrate en SINC como periodista.