Las proyecciones de energía (World Energy Outlook) que la Agencia Internacional de la Energía (IEA, por sus siglas en inglés) presentó ayer en Londres establecen que el 36% del crecimiento del uso de energía global tendrá como epicentro China, que según los datos preliminares se convertirá en 2035 en el mayor consumidor de energía del mundo, con un 22% de la demanda mundial a su cargo.
La IEA avanzó otros datos en la rueda de prensa. El barril del petróleo pasaría del los 60 dólares (43 euros) de comercialización en 2009 y 100 dólares (75 euros) en 2015, hasta alcanzar un valor superior a los 200 dólares (150 euros) en 2035, momento en que se prevé que se alcance el pico en la producción convencional y comience el declive de las reservas. Aunque los técnicos de la Agencia señalan que es posible que los precios a corto plazo continúen siendo volátiles (el pasado 9 de noviembre se vendía por 87,63 dólares, el precio más alto desde octubre de 2008).
Por otro lado, la IEA denuncia la necesidad de acabar con los subsidios para los combustibles fósiles (petróleo, carbón y gas) que absorbieron 312.000 millones de dólares (225.000 millones de euros) en todo el mundo de las arcas públicas frente a los 57.000 millones de dólares (41.000 mill. euros) destinados a incentivar el desarrollo de energías renovables.
En el ‘Escenario de Nuevas Políticas’, el modelo más arriesgado que ha elaborado la IEA, se establece que el 93% del incremento de la demanda entre 2008 y 2035 provendrá de los países en vías de desarrollo, con un 36% de responsabilidad exclusiva de China.
Estos datos serían el resultado de un mayor crecimiento económico y de la producción industrial en estos países. China se situaría a la cabeza como líder en la liga de los países que más energía consumen en el mundo y en 2035 sería él solo responsable del 22% de la demanda mundial, con EE UU en segundo puesto.
Así, el país asiático registraría un aumento del 75% en su demanda entre 2008 y 2035 y, según los datos preliminares, desplazaría a EE UU en 2009 como el mayor consumidor de energía del mundo. Un dato sorprendente si pensamos que en 2000 el consumo de energía en China fue la mitad que en EE UU y que el aumento de éste fue, entre 2000 y 2008, cuatro veces mayor que en la década anterior.
¿Hacia una edad dorada del gas?
“Es difícil exagerar la creciente importancia de China en los mercados energéticos. Cómo reaccione este país ante las amenazas de la seguridad energética global y del clima impuesto por el aumento en el uso de combustibles fósiles tendrá consecuencias de largo alcance para el resto del mundo”, afirma a SINC Nobuo Tanaka, director ejecutivo de IEA.
La IEA señala también que el papel de China en tecnologías energéticas de bajas emisiones podría ser crucial en todo el mundo, y lo designa como “el país que podría llevarnos a una edad dorada de gas”.
Pese al intento de limpiar y poner color verde al mundo de las energías los combustibles sucios, y en especial el gas y el petróleo, seguirán siendo la fuente de energía dominante. La demanda de petróleo crecerá de forma gradual hasta alcanzar los 99 millones de barriles consumidos globalmente al día en 2035, 15 millones más que en la proyección de 2009. El crecimiento procede de países que se encuentran fuera de la OECD (Organización para la Cooperación y el Desarrollo), con China siendo responsable de más de la mitad.
La IEA ha dejado claro, sin embargo, que es hora de eliminar los subsidios a las energías fósiles, que hoy son más de cinco veces mayores que los que reciben las renovables. Y afirma que el crecimiento de las energías limpias necesita del apoyo de los gobiernos.
“Las energías renovables podrían jugar un papel fundamental en reducir las emisiones de dióxido de carbono y la diversificación del suministro, pero sólo si reciben apoyo firme y sostenido de forma accesible”, afirma Tanaka.
A pesar de la necesidad de apoyo, la mezcla de eólica, solar, marina, geotermal, hidráulica y biomasa triplica su presencia entre 2008 y 2035 según las previsiones, y su porcentaje común en la demanda primaria de energía pasa del 7% al 14%.