EN DIRECTO: Auroras boreales desde Groenlandia 2012

Disfruta en directo de las auroras del hemisferio norte.

Darán el espectáculo

El momento para la observación es propicio: en la actualidad existe un aumento de la actividad solar que produce las auroras y que alcanzará su máximo a mediados de 2013. Esta aurora boreal fue observada desde el sur de Groenlandia, en el poblado de Quasiarsuk.

El sur de Groenlandia, el mejor mirador

El círculo oscuro señala la zona desde donde se realizarán las observaciones. "Debido a que el polo norte magnético no coincide con el polo norte geográfico y se encuentra situado al noroeste de Groenlandia, en concreto al norte de Canadá, cerca de la isla Ellesmere, el sur de Groenlandia es una de las mejores plataformas de observación", explica Miquel Serra-Ricart.

Aurora verde, la más común

En la imagen, una aurora austral –del Polo Sur– vista desde el satélite IMAGE de la Nasa en 2005. “La emisión de luz se produce en la alta atmósfera, entre 100 y 400 kilómetros, y se debe a los choques del viento solar, compuesto esencialmente por electrones con átomos de oxígeno, lo que origina los tonos verdosos, que son los más comunes”, indica Miquel Serra-Ricart.

Acampados en el polo

Este es el campamento base desde donde se realizarán las retransmisiones de la expedición Shelios 2012 para observar las auroras boreales desde el glaciar Qaleraliq, en Groenlandia.

El cielo cubierto por cortinas de luz

Del 24 al 28 de agosto, SINC ofrecerá en directo la retransmisión de uno de los espectáculos celestes más bellos, las auroras boreales, gracias a la señal del proyecto europeo GLORIA. Para verlas, habrá que trasnochar: las auroras se verán a partir de las 3:00 de la madrugada (hora peninsular española) y estarán comentadas en español y en inglés.

La expedición Shelios 2012 , coordinada por el investigador del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) Miquel Serra-Ricart, observará las auroras al sur de Groenlandia en los alrededores del glaciar de Qaleraliq, del 20 al 29 de agosto. Pero las auroras boreales –que se ven en el hemisferio norte– se podrán ver también desde la web de SINC, sin necesidad de embarcarse en la expedición.

SINC recibirá la señal recogida por el proyecto europeo GLORIA, cuyos miembros se unirán a Shelios 2012 para realizar una retransmisión del fenómeno del 24 al 28 de agosto. Todas las noches se conectará en directo durante 10 minutos a las 03:00, hora peninsular española (01:00 UT, 23:00 hora local del día anterior en Groenlandia).

Miquel Serra-Ricart en español y Vanessa Stroud en inglés detallarán conceptos astronómicos relacionados con las auroras y la actividad solar.

Todas las imágenes recogidas estarán inmediatamente disponibles para su uso en las actividades educativas.

Expectación máxima

El año pasado, la expedición Shelios 2011 encontró una menor actividad de auroras que la esperada, debido al aparente retraso del máximo de actividad solar. Por eso no se pudo retransmitir el fenómeno en directo, aunque sí ofrecer a los espectadores de todo el mundo impresionantes imágenes y vídeos de las auroras observadas en diferentes momentos de la expedición. En esta ocasión, por el aumento de la actividad solar, se espera una mayor actividad de auroras.

Las auroras polares se producen cuando partículas muy energéticas originadas en el Sol alcanzan la atmósfera de la Tierra. La entrada está gobernada por el campo magnético terrestre y por ello sólo pueden penetrar por el Polo Norte (auroras boreales) y el Polo Sur (auroras australes). Durante los máximos solares hay un aumento del viento solar y, por tanto, crece el flujo de partículas elementales que al llegar a la Tierra son dirigidas hacia los polos magnéticos.

Tormentas solares que afectan a la Tierra

“Es conocido que durante el máximo solar ocurrido en el año 1989, con intensas tormentas solares, varias ciudades del norte de los Estados Unidos y Canadá tuvieron graves problemas en el suministro eléctrico. También varios satélites sufrieron anomalías temporales en el transcurso de las citadas tormentas”, detalla Serra-Ricart.

La relación entre la actividad solar y el clima terrestre es un tema a debate en los últimos años. Hay indicios que hacen pensar que durante los mínimos de actividad solar la Tierra sufre un enfriamiento. Entre los años 1645 y 1715 se cree que existió un mínimo solar prolongado (el mínimo de Maunder) que provocó una pequeña edad de hielo en el planeta, con efectos constatados en el norte de Europa.