El declive de la población de tiburones, uno de los principales depredadores marinos, puede causar cambios en la forma del cuerpo de los peces y hacer que tengan ojos y colas más pequeños, ha informado esta semana un equipo de científicos de Australia y EEUU, tras analizar muestras en los arrecifes de coral australianos de Rowley Shoals y Scott Reefs. Según los autores, la pesca de tiburones ha podido causar potencialmente la reducción del tamaño del cuerpo de los peces y de los órganos que son importantes para la detección y la evasión de sus depredadores.