Las pruebas de neuroimagen pueden predecir con 15 o 20 años de antelación la aparición de los primeros síntomas de la enfermedad de Alzheimer porque detectan algunos cambios cerebrales y una fase preclínica silenciosa y sin síntomas.
Así lo realiza el estudio alfa de la Fundación Pasqual Maragall, cuyos resultados abren la puerta al tratamiento personalizado de la enfermedad.
En el trabajo han participado más de 2.700 voluntarios, adultos sanos de entre 45 y 75 años, en su mayoría hijos de personas afectadas por el alzhéimer.