Las nuevas tecnologías de vehículos no tripulados, sensores, sistemas de comunicación e IA están ampliando a pasos agigantados el conocimiento y conservación de los fondos marinos.
Trabajan en tres laboratorios del Centro de Investigaciones Biológicas Margarita Salas y utilizan como herramientas biotecnológicas enzimas, bacterias y hongos con el fin de avanzar en su desarrollo y mejorar sus propiedades.